Los locales comerciales de las galerías bajo la Plaza Mayor de Palma ya no pueden abrir. Desde el Ayuntamiento, los partidos del Pacto ya habían advertido que no ampliarían la concesión de los locales por 50 años, aunque los afectados aún querían albergar alguna esperanza.
Igual que sucedió en julio con los placeros del Mercado municipal de Camp Redó, terminan unos negocios y se echa la persiana, sin una
alternativa. De nuevo, el Consistorio ha abocado a pequeños empresarios a un final incierto durante los últimos meses. En esta ocasión no ha sido hasta el día siguiente de la obligada devolución de las llaves de los locales, cuando el alcalde José Hila se ha sentado con las asociaciones de comerciantes.
El socialista recibía a representantes de Pimeco y Afedeco, ante la sorpresa e indignación de muchos, incluida la oposición política, que
recordaba la pasividad del Gobierno municipal ante la situación en la que se dejaba a quienes regentaban locales en las galerías comerciales de la Plaza Mayor. La concejal del PP en Cort Lydia Pérez Martínez lamentaba en esRadio97.1 el “modus operandi” del Pacto.
La edil popular también señalaba que su partido ya recordó al equipo de Gobierno de Cort mediante una proposición que el vencimiento de las licencias para los establecimientos de la galerías expiraba en septiembre. Sin embargo, el día determinado por Cort por la devolución de llaves de locales, sólo se las entregaron 7 de los 53 arrendatarios.
Mientras, el alcalde Hila se ha comprometido –una vez que ya han cerrado las galerías- a buscar junto con los representantes del Comercio una solución que permita llevar a cabo el nuevo proyecto para las galerías de la Plaza Mayor. Por su parte, el presidente de Afedeco, Antoni Gayá, ha considerado que ahora que hay que trazar
un nuevo proyecto, con un estudio que no caduque en cinco o diez años y que lo importante para los comerciantes de la zona es que sea un espacio que suponga un motivo de orgullo para todos.